La Conselleria de Salud de la Generalitat ha impulsado una gran reforma de la atención primaria que prevé, en un plazo de siete a diez años, sumar 5.300 nuevos sanitarios y pasa por crear equipos de cabecera asignados a cada usuario en los centros de atención primaria (CAP) que incluirán, además de médicos y enfermeras, a trabajadores sociales y administrativos sanitarios.
En concreto, la reforma prevé una dotación de 218 millones de euros para aumentar la plantilla de los nuevos equipos de cabecera en unos 5.000 profesionales --1.500 médicos, 2.500 enfermeras, 130 trabajadores sociales y 800 auxiliares administrativos-- a lo largo de siete años, como escenario presupuestario "realista", pero se puede alargar a diez años siendo pesimistas, según Comín, Connseller de Salud.